No se trata de una simple sonrisa. Para apaciguar el dolor, dice un estudio, hace falta una buena carcajada que produzca la liberación de sustancias químicas que actúen como analgésico natural.
En el estudio, que fue publicado en la revista científica Proceedings of the Royal Society B, los autores experimentaron por primera vez con el umbral del dolor en las personas.
Los voluntarios fueron divididos en dos grupos: el primero de ellos disfrutó de videos humorísticos durante 15 minutos, mientras que el otro vio programas más aburridos, según los investigadores, tales como juegos de golf.
Aquellos sujetos que recientemente se habían reído a carcajadas fueron capaces de resistir el dolor hasta un 10% más que antes de ver los videos.veer mas a qui.