La docente de Michigan se quedó sin trabajo por negarse a dar datos confidenciales de su cuenta a autoridades del colegio en el que trabajaba. La red social había denunciado un incremento en este tipo de prácticas.
Todo comenzó en tono de broma. Kimberly Hester, profesora en el Frank Squires Elementary School en Cassopolis, Michigan, publicó una foto de un compañero de trabajo a su página personal en Facebook. Un padre de unos de sus alumnos tuvo acceso al post y notificó a las autoridades del colegio, reportó The Huffington Post.
Días después, un directivo del instituto le exigió a la profesora que le entregara la contraseña de Facebook. Frente a la negativa, fue suspendida.
La historia llegó a oídos de los republicanos Matt Lori y Aric Nesbitt, quienes se contactaron con la maestra para agregar su caso a un proyecto de ley que concebiría ilegal que los empleadores pidan a los trabajadores información personal de sus cuentas en redes sociales.
Pero en Washington, la Cámara de Representantes rechazó la semana pasada una iniciativa que impedía que las empresas exijan a los empleados actuales o potenciales a entregar contraseñas.
En respuesta, Facebook emitió un comunicado el 23 de marzo que refuerza su compromiso con la protección de la privacidad del usuario, amenazando con demandas contra las compañías que hacen esas peticiones.
“Si eres un usuario de Facebook, jamás deberías compartir tu contraseña, dejar que alguien acceda a tu cuenta, o hacer cualquier cosa que ponga en riesgo la seguridad de tu cuenta”, dijo Erin Egan, jefa de privacidad de la compañía.