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EL SEIBO.- Porque se parecía a ella
en su juventud y por su altruismo a favor de los más necesitados, una anciana
de 87 años de edad, nativa de El Seibo, regalará un brazalete
de morocota en oro a Margarita Cedeño de Fernández..
El diamante
fue confeccionado en 1878 en Mallorca, España y según la octogenaria
Lucila Ozema de Castro Aybar, perteneció a la primera dama Trina de Moya,
esposa del presidente Horacio Vásquez hacia 1930.
La
prenda tiene un valor estimado en el mercado de un millón de pesos, pero
que para ella su valor histórico trasciende los límites de la pasión y el
amor.
A sus 87
años de edad "Mamá Nersy", como es conocida en el mundo
católico, vecinos y familiares, goza de una estupenda lucidez y su decisión de
donar o regalar la pulsa en oro a la Primera Dama dominicana, es tan decidida que ha
buscado un notario para hacer una declaración jurada, copia de la cual entregó
a LISTIN DIARIO.
La pieza
es de 21 quilates y según la dama presenta una figura del Rey Alfonso
XII, de un lado y el escudo heráldico de España del otro.
El
testamento legal, preparado por el notario seibano, Guarionex Moreno
Altagracia, señala que la valiosa prenda en oro, la señora Ozema de Castro, la
recibió en donación de manos de su abuela, Ramona Piantini de Morales, que se
la donó su amiga, Moya, esposa del presidente Vásquez.
El
testamento expone en uno de sus párrafos que el oro llegó a mano de su abuela
por la gran amistad que existió entre de Moya y la madre de Báez.
“Hago esta
declaración por dos razones: La primera, como obtuve dicha prenda y la segunda,
el valor histórico que posee por haber pertenecido a una Primera Dama, por lo
que quiero dejar constancia de que mi declaración constituye una fiel
verdad de lo declarado”, expone la dama ante e notario.
La anciana
llevó ante el notario para dejar constancia de la donación a los testigos
Federico Oscar Morales Beras y a Ramón Elpidio Morales Aybar.
Admiración
por Margarita
“Margarita
se parece a mis tiempos, en el vestir elegante y servirle a la gente; siento
una gran admiración por la
Primera Dama y es eso lo que me lleva a darle este regalo”,
expresa con alegría la anciana.
Explicó que
ha instruido a su hijo de crianza, Jossan Capell, quien el el director del
distrito municipal La Higuera ,
de El Seibo, de gestionar el encuentro en su casa para donar la
pulsera de oro a la
Vicepresidenta electa.
“Esa pulsera
en oro de morocota, que perteneció a la esposa del presidente Horacio Vásquez,
me la donó mi abuela, por ser su primera nieta en nacer y haber ganado el reinado
de la primera reina electa por las autoridades municipales de El Seibo hacia 1963” , acotó.
Dijo esperar
que Margarita Cedeño de Fernández, quien ya está enterada de la donación que se
hará, visite su casa de la calle Brigadier Juan Sánchez Ramírez No. 100,
del ensanche Palo Hincado de El Seibo a recibir el regalo y disfrutar de un
suculento salcocho que se le preparará.
“No quiero
irme de este mundo, sin que la primera dama, Margarita Cedeño reciba de mis
manos este pedazo de historia que conservo en su cofre original”, dijo Mamá
Nersy, como se conoce la desprendida mujer en El Seibo.
Jossan
Capel, hijo adoptivo de doña Lucila, dijo que su madre es una mujer tan
desprendida, que también ha dejado pase a ser la casa curial de la iglesia
católica en El Seibo así como cinco tareas para construcción de un seminario
para la formación de sacerdotes en aquella ciudad.
El
funcionario municipal asegura que cuando se ha visto en apuros, ha empeñado la
ajorca o pulsera en 250 mil pesos en la compraventa “El Primo”, en San Pedro de
Macorís.
“Ha sido la
decisión de mi madre, yo vivo por ella y no nos oponemos a su deseo, si ella lo
quiere así, así se hará”, dijo.
Manifestó
que se está amarrando el día para que Cedeño de Fernández, venga a
recibir el oro, que aseguró en el mercado local tiene un valor de casi un
millón de pesos.
La casa de
doña Nersy ha sido arreglada y pintada para la visita de la Primera Dama que se
puede producir en cualquier momento.
la joya se
conserva en su cofre original y está guardada en una caja fuerte donde la
acaudalada anciana guarda sus joyas y documentos.
Fuente Almomento.net