Martes 07 De Julio 2012 by Frank Jiménez.
Etiqueta Noticia
Según
la investigación, existen dos momentos a lo largo del año en los que las
personas se sienten más inclinadas a buscar material erótico en la red: el
comienzo del verano y el invierno. En concreto, el mes de diciembre,
coincidiendo con las vacaciones de Navidad.
La
mayor parte de estudios sobre las costumbres sexuales habían recurrido a
cuestionarios y encuestas como método de investigación, pero hasta ahora
ninguno había recurrido a los datos de Google Trends. A partir de los datos
recogidos durante cinco años, la pareja de científicos intentó averiguar cuáles
son los momentos del año donde buscamos más contenido sexual en la red. No hace
falta detenerse demasiado en el gráfico proporcionado por los investigadores
para descubrir que la forma de onda desvela unos picos claros en el comienzo
del verano y el invierno. Además, los estudiosos señalan una bajada de las
búsquedas a partir de 2009, y sugieren que esto puede estar relacionado con la
crisis mundial.
Era
en estos dos momentos del año, junio y diciembre, cuando más tráfico tenían las
páginas de citas y de vídeos pornográficos, y también cuando más se buscaban en
el buscador por excelencia palabras como “tetas”, “culos”, ”sexo”, “porno”,
“desnudo”, etc. El problema, señalan los investigadores, es que también otros
términos que describen actividades ilegales, como la prostitución (“escort”,
“prostituta”), eran muy frecuentes en dichos momentos del año. Los
investigadores señalan, frente a la posibilidad de que este aumento de
búsquedas se corresponde meramente con un mayor uso de Internet, que estos
picos no se reproducían en la búsqueda de otras palabras que no están
relacionadas con el sexo. Se ha argumentado en contra del estudio que gran
parte de estas búsquedas suelen ser realizadas por hombres, por lo que sólo
tendría validez referidas a estos.
El
ciclo semestral
Los
autores recalcan en su artículo que no es la primera vez que se identifica en
un estudio científico este ciclo que comprende seis meses. Existen dos
explicaciones que suelen utilizarse para responder a esta incógnita. Por un
lado, la cultural, que implicaría que los picos coinciden con aquellos momentos
en los que se dispone de más tiempo libre, como es el comienzo de las
vacaciones de verano, que llevarían a los usuarios de la red a buscar pareja
una vez se han librado de sus obligaciones laborales. Pero también es posible
que existan ciertos ciclos ligados con nuestra biología y los cambios
climatológicos que aún no se han descubierto y justifiquen esta concepción.
En
un estudio canónico realizado en Estados Unidos por Daniel A. Seiver en 1985,
el primero realizado con una vocación exhaustiva, el investigador concluyó que
la mayor parte de los nacimientos en Estados Unidos se producían durante el
final del verano y a principios de otoño, lo cual implicaría la mayor parte de
embarazos se produciría precisamente en Navidad. Al mismo tiempo, los datos
presentados en diversos estudios realizados por Dennis Fortenberry y sus
colegas del Centro de Promoción de Salud Sexual, manifiestan que es al comienzo
del verano cuando la actividad sexual de riesgo alcanza su cénit anual.
Otro
estudio, aplicado esta vez a la población alemana, se encuentra en consonancia
con los resultados obtenidos por los Markey. Realizado por A. Lerch a finales
de los noventa, a partir las estadísticas del período comprendido entre 1946 y
1995, el estudio concluía que los momentos de mayor actividad sexual para los
alemanes se encontraban en mayo y diciembre, mientras que los meses de marzo y
octubre contemplaban un menor número de relaciones sexuales. Además, los datos
proporcionados por K. Wellings en su estudio Variaciones estacionales en la
actividad sexual y sus implicaciones para la promoción de la salud sexual
resultan consistentes con los descubrimientos realizados por los investigadores
de Filadelfia. Según sus datos, los períodos en los que se venden más
preservativos son durante el verano y en las vacaciones de Navidad. Pero aún
queda por averiguar si este aumento de la actividad sexual es producto de un
aumento del deseo interno o consecuencia de la disposición de más tiempo
libre. Fuente: elconfidencial.com