Martes 06 de Agosto 2013 by Francisco Jimenez
Etiqueta Noticia.
La situación política de Hipólito Mejía a lo interno del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) está cada vez más complicada por la presión que ejercen varios de los dirigentes que hasta ahora se han mantenido a su lado de que se produzca un acuerdo con el presidente de ese partido, Miguel Vargas, que implicaría que la revisión de las medidas disciplinarias se harían después de la convención que sería pactada para el 23 de febrero del 2014.
Esos dirigentes le dieron el visto bueno a un entendimiento en esos términos el pasado 31 de julio, pero fue rechazado por otros allegados al expresidente por la poca garantía que ofrece un acuerdo de ese tipo para Mejía y Andrés Bautista volver al PRD. El dilema de Mejía está en que aceptar un acuerdo en esos términos es inseguro y hasta humillante, pero negarse radicalmente podría dar paso a un acuerdo sin él, lo que lo dejaría fuera de juego y la sensación de que va perdiendo apoyo. Esos perredeístas están conscientes de que Vargas tendrá ganancia de causa debido a que la reunión del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) que realizó cumple con los requisitos legales, contrario al CEN de los Prados que no fue convocado en el marco de lo que establecen los estatutos de ese partido de que la convocatoria debe hacerla el presidente o las dos tercera parte de la matrícula de la Comisión Política. Es en ese entendido que Tony Peña Guaba, del sector de Luis Abinader, así como Guido Gómez Mazara y Eligio Jáquez han iniciado las gestiones de un acuerdo entre los bandos. Entre los perredeístas se comenta que el grupo de los llamados Nini no está dispuesto a perder su espacio político por la causa de los sancionados.LEER MAS.