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Según los confidentes de la DEA, la “Mujer del Año 2007″ cobraba 50 mil dólares por brindar protección a los bombardeos de droga en las costas del noreste del país
Santo Domingo.- La exjefa de la Dirección Nacional de Control del Drogas (DNCD) en la división Noreste, Raysa de la Cruz Olivares, estuvo presa en Puerto Rico entre el 22 y el 26 de marzo de este año, específicamente en el Centro Metropolitano de Detención (MDC) en Guaynabo, de acuerdo a una nota publicada en el periódico El Nuevo Día de la Isla del Encanto, basado en un expediente electrónico de casos federales.
El cargo radicado en su contra es el de narcotráfico. Ella, utilizando su cargo de jefa de la División Noreste de la DNCD (San Francisco, La Romana, Higuey y San Pedro de Macorís) habría facilitado operaciones de narcotráfico, incluso, se habla de que habría conspirado para introducir drogas a Estados Unidos, utilizando como puente a Puerto Rico, donde reside actualmente.
El 22 de marzo, tras su arresto, De la Cruz Olivares compareció ante el juez federal Marcos López, y estuvo representada por el abogado Francisco Acevedo.
De acuerdo al expediente, el magistrado le habría informado a la excapitana de la DNCD que en el distrito Sur de Nueva York se había radicado una denuncia criminal en su contra por cargos de conspirar, desde 2006 hasta 2008, para poseer con intención de distribuir, cocaína.
“En un principio, el magistrado federal ordenó que permaneciera presa en el Centro Metropolitano de Detención (MDC) en Guaynabo pero luego, específicamente el 26 de abril, le concedió libertad bajo fianza de $20,000 no asegurada con la condición que se entregara a las autoridades federales de Nueva York“, reza la nota de El Nuevo Día.
Raysa de la Cruz Olivares acordó con la Fiscalía Federal de Puerto Rico entregarse en Nueva York antes del 18 de abril, pero el 16 de abril la exoficial radicó una moción urgente solicitando al tribunal que le concediera hasta el 25 de abril para viajar a NY, según el expediente.
La denuncia contra De la Cruz establece que durante su gestión facilitó que cargamentos de cocaína que llegaban de Suramérica a República Dominicana fuesen descargados en zonas seguras y libre de la presencia de las autoridades, por ese servicio cobraba la suma de 50 mil dólares.
“(Una fuente confidencial CW-1) indicó que cada uno de los bombardeos era de más de 400 kilos aproximados de cocaína y que una vez la droga llegaba a República Dominicana, otros co-conspiradores la transportarían en embarcaciones a Puerto Rico, entre otros lugares”, reza la declaración jurada.
“De acuerdo al confidente CW-2, De La Cruz Olivares despejaba el área de la zona de bombardeo para que la recolección de la droga pudiese llevarse a cabo sin la interrupción de las autoridades de ley… CW-2 también recuerda que De La Cruz Olivares generalmente proveía escolta por oficiales de ley a los vehículos que transportaban la droga lejos de la zona de bombardeo…”, añade la acusación federal.
Se defendió como gata bocarriba
Este lunes, la excapitán del Ejército Nacional negó todas estas informaciones en un programa de televisión en República Dominicana con el que se comunicó vía Skype. “No sé quién quiere hacer sensacionalismo conmigo“, dijo De la Cruz para explicar que no sabe quién o quiénes tendrían la intención de hacerle daño.
Aseguró no haber sido requerida por las autoridades de Puerto Rico, país en el que reside, junto a su esposo y sus hijos, desde hace tres años y medio. Actualmente está en avanzado estado de gestación.
